¡Malos hábitos que deterioran tu piel!

Hay muchas cosas que hacemos a diario y no sabemos que estamos lastimando nuestra piel. Entérate de qué es lo que puede estar haciendo que no luzcas una piel radiante y trata de cambiar los malos hábitos por buenos.

A continuación, vamos a comentar los que consideramos más significativo:

 

No visitar al dermatólogo

Es aconsejable acudir al especialista una vez al año para revisar los lunares o manchas cutáneas.

 

Tocarte los granos y espinillas

Al hacerlo, aumenta la inflamación y la infección puede agravarse e incluso extenderse a otra zona del rostro.

 

Fumar

El humo del tabaco, al entrar en contacto con la piel, da lugar a la formación de radicales libres y con ello al envejecimiento prematuro y la formación de arrugas. Además, la piel de los fumadores es más propensa a la deshidratación y su aspecto resulta apagado y grisáceo.

 

El consumo excesivo de alcohol

El consumo moderado de alcohol no supone ningún problema para la piel, sin embargo, si nos excedemos, el nivel de agentes inflamatorios presentes en la sangre aumentará considerablemente y, en consecuencia, el proceso natural de envejecimiento se acelerará.

 

Una alimentación inadecuada

En gran medida, la alimentación determina nuestro aspecto físico general, lo que por supuesto incluye el de nuestra piel. Por tanto, para conseguir un cutis radiante y libre de impurezas es imprescindible tener en cuenta qué ingerimos: Algunos alimentos contienen vitaminas que, por sus propiedades específicas, son especialmente beneficiosas para la piel.

 

No dormir lo suficiente

Por la noche, nuestra piel repara los daños sufridos durante el día: los procesos celulares se aceleran al máximo para regenerar y reconstruir la elastina y el colágeno. Por ello, dormir 8 horas diarias y cuidar la piel antes de acostarse es fundamental para mantenerla en buen estado.

 

Si estás haciendo alguno de estos malos hábitos, te recomendamos que los cambies poco a poco, verás que en un mes tu piel te lo agradecerá y lucirás espectacular.