¿Qué pasa cuando el aceite de oliva se somete a temperaturas muy altas?

La mayoría cocinamos con aceite de oliva y existen varios artículos que mencionan que su consumo moderado aporta propiedades que son benéficas para la salud. Pero lamentablemente, cuando el aceite de oliva es sometido a altas temperaturas, es posible que estas propiedades buenas se pierdan al transformarse en grasas saturadas. Estas grasas son perjudiciales para la salud, lo que afecta la parte arterial del corazón y, además, ocasiona la acumulación de grasa visceral (alrededor de los órganos) y corporal.

 

Si se observan las composiciones químicas de éste y otros aceites, estos se encuentran “cargados” de átomos de hidrógeno. Al calentar este aceite a temperaturas elevadas, se produce un proceso de hidrogenación sobre este aceite. La interacción entre el aire y el hidrógeno, hace que el aceite se hidrolice y a la vez se hidrogenice, haciendo que los mismos se vuelvan cada vez más y más saturados al ganar cada vez más y más átomos de hidrógeno dentro de su composición.

 

En pocas palabras al calentar el aceite a temperas muy elevadas este hace una reacción química que evita que nuestro cuerpo lo use en procesos metabólicos y por ende se almacena como grasa. Por eso, es importante cocinar antes de que el aceite se “queme” para evitar que pierda por completo sus propiedades.